El objetivo del programa es crear dispositivos médicos que sean robustos, fáciles de usar y rentables, diseñados para ayudar a los médicos a detectar rápidamente lesiones cerebrales en el campo de batalla, especialmente en situaciones remotas
Fort Liberty.- El equipo de la Unidad de Desarrollo de Material Médico del Ejército de EE.UU. y médicos militares participaron en un evento clave en Fort Liberty, evaluando dispositivos de detección de lesiones cerebrales traumáticas (TBI) en desarrollo.
El evento, realizado en el Centro de Conferencias Iron Mike, permitió que soldados probaran dos dispositivos diseñados para detectar TBI en entornos simulados de combate, proporcionando retroalimentación esencial para mejorar su funcionamiento.
El objetivo del programa es crear dispositivos médicos que sean robustos, fáciles de usar y rentables, diseñados para ayudar a los médicos a detectar rápidamente lesiones cerebrales en el campo de batalla, especialmente en situaciones remotas.
Estos dispositivos permitirán a los médicos militares tomar decisiones informadas sobre el tratamiento antes de evacuar a los soldados heridos.
Según el Teniente Coronel Dana Bal, gerente de producto del Proyecto de Preparación y Salud Cerebral de los Guerreros. la retroalimentación de los soldados y médicos es vital para asegurar que los dispositivos cumplan con los requisitos del personal médico en situaciones de combate.
Desde el año 2000, el Departamento de Defensa ha reportado más de 505,000 casos de TBI, muchas veces sin signos externos visibles, lo que complica su diagnóstico en el campo.
Los dispositivos en desarrollo buscan mejorar la capacidad de los médicos para identificar y tratar estas lesiones desde el lugar de la lesión hasta su evacuación, optimizando así los tiempos de respuesta en futuros conflictos.
lA Unidad de Desarrollo de Material Médico del Ejército de EE.UU en colaboración con diversas agencias militares, continúa trabajando en la aprobación de la FDA y la implementación de estas soluciones médicas para proteger a los combatientes en todo el mundo.
Estos esfuerzos son parte de un compromiso continuo para mejorar la atención médica en zonas de combate y garantizar la salud y seguridad de los soldados.
