POR ESTHER BENIFLAH
Al acercarse las fiestas, una especie de alarma se enciende en el mundo de las mascotas. La tendencia de los hispanos a hacer partícipes a los perros de la comida familiar, es un error que puede salir muy caro. Nuestros perros nos acompañan, con gran cariño, en los momentos más felices de celebración familiar, pero cuidado con los restos de comida.
«Permitir que el perro coma restos de una parrilla, atraído por los olores del asado, solo le ocasionará problemas. Básicamente, porque el animal se alimenta mejor que nosotros, de forma más sana», explica el Dr. Héctor Avilán, médico veterinario y experto en nutrición de perros de Maximus Dog Nutrition.
Nuestro mejor amigo desciende del lobo, un animal depredador que se alimenta de carne. Pero, esto no significa que los perros deban consumir pura carne, ni mucho menos residuos de las comidas humanas. Ellos están bajo el orden de los carnívoros, pero sus características intestinales presentan rasgos en común con los omnívoros.
Hoy en día, los perros tienen la ventaja de que existen en el mercado alimentos balanceados nutricionalmente, con la proteína necesaria para un buen funcionamiento orgánico: provienen de carnes de pollo, pescado, cerdo, bovinos… Así como un excelente balance de nutrientes naturales, con fibras, grasas, vitaminas, minerales y otros beneficiosos para su salud.
Pero, ¿qué hacemos con esa mascota intranquila, que apenas nos deja comer porque incluso quiere subirse a la mesa?
«Debemos enseñar al perro a comportarse, y ahí entra la parte psicológica. Si le damos sobras de nuestra comida, luego vendrán los problemas estomacales. Hay que acostumbrarlo a comer dos veces al día. No puede hacerlo todas las veces que quiera», alerta el experto de Maximus Dog Nutrition.
El Dr. Avilan expone una teoría interesante: Cuando vamos a decidir qué alimento dar a nuestra mascota, es importante tomar en consideración si seríamos capaces de comerlo. Sí, nosotros mismos.
«La mayoría de las veces, los humanos no comemos sanos. Los pasos a seguir para disfrutar el alimento son: que nos atraiga, que nos guste, que sea digerible y que su digestión sea favorable para nuestra salud. Al comprar comida para perros, sigamos los mismos pasos nuestros», explica.
Como veterinario, el Dr. Héctor Avilán ha participado en el diseño y fabricación de alimentos para perros, caballos y otras mascotas. Hoy, como cofundador de Maximus Dog Nutrition, es uno de los hispanos más reconocidos en este sector. La compañía impulsa el inspirador programa #InseparableForLife, con el propósito de motivar a los dueños de perros a que den un compañero a la mascota que ya tienen en casa.
«Primero, busquemos la comida que atraiga al perro. Que, en cuanto vea la bolsa, ya comience a imaginar su olor. El alimento debe oler como si nosotros lo pudiéramos comer también, pero que ese olor no invada nuestro espacio», dice.
Vienen días de grandes celebraciones, a pesar del impacto de la pandemia. Afortunadamente, nuestros perros nos acompañarán en todas, porque formamos parte de una gran familia. En los aperitivos, almuerzos y cenas, no cometamos el error de ofrecerle residuos. Por su propio bien.