Entre las medidas correctivas dijo que ha ordenado el uso máximo de agentes especiales del Servicio Secreto, oficiales de la División Uniformada y personal de apoyo técnico en sitios de protección para abordar este entorno de seguridad elevado.
Washington, D.C. – El Director Interino del Servicio Secreto de EE.UU., Ronald L. Rowe, Jr., al testificar ante comisiones del Senado dijo que una parte fundamental de la misión del Servicio Secreto es proteger a los líderes gubernamentales y que en el intento de asesinato del expresidente Donald J. Trump el sábado 13 de julio de 2024, en un mitin de campaña en Butler, Pensilvania, fue un fracaso en múltiples niveles.
Refirió que hay múltiples investigaciones en curso sobre el ataque y reconoció los fallos de seguridad que ocurrieron ese día; no obstante dijo que no esperarálos resultados de esas investigaciones para evaluar dónde hubo el fallo.
Dijo sentirse avergonzado luego de haber visitado la ciudad de Butle, Pensilvania y haber estado en el sitio donde ocurrieron los hechos especificamente en el techo donde se encontraba el atacante de Donald Trump.
Entre las medidas correctivas que ha tomado en materia de seguridad, luego de su nombramiento mencionó que ha ordenado el uso de drones, en sitios de protección para ayudar a detectar amenazas en techos y otras áreas elevadas. También he dirigido recursos para facilitar las comunicaciones en sitios de protección, particularmente las comunicaciones con los socios estatales y locales, donde un retraso, incluso de unos pocos segundos en la comunicación, puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Estos recursos proporcionarán una interoperabilidad de radio mejorada y comunicaciones de imagen operativa común que no estaban presentes en Butler.
Ha solicitado recursos para que se aprueben expeditamente y ha ordenado el uso máximo de agentes especiales del Servicio Secreto, oficiales de la División Uniformada y personal de apoyo técnico en sitios de protección para abordar este entorno de seguridad elevado.
El Director Interino Rowe destacó la valentía de los agentes del Servicio Secreto, quienes protegieron al ex presidente con sus cuerpos durante el ataque.
Rowe afirmó su compromiso con las investigaciones en curso y la rendición de cuentas. Además, se comprometió a cooperar plenamente con el Congreso y otras agencias investigadoras para asegurar que eventos similares no se repitan.
Finalmente, Rowe agradeció a las agencias federales, estatales y locales por su colaboración y reafirmó la dedicación del Servicio Secreto en proteger a los líderes nacionales y eventos de seguridad nacional.
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