El Aeropuerto Regional de Asheville continúa comprometido a mantener las puertas abiertas para los esfuerzos de ayuda necesarios, con vuelos comerciales que reanudaron sus operaciones tan solo tres días después de la tormenta.
Asheville, NC – En una emotiva carta dirigida a la comunidad de Western North Carolina, Lew Bleiweis, presidente y director ejecutivo del Aeropuerto Regional de Asheville (AVL), ha compartido una actualización sobre las operaciones del aeropuerto y su papel crucial en los esfuerzos de recuperación tras la devastadora tormenta Helene.
En su carta expresa que ha medida que avanzan hacia una fase de recuperación, el aeropuerto ha demostrado ser un eje vital de apoyo, no solo como punto de conexión aérea, sino como un centro de ayuda humanitaria para los afectados.
«El equipo del Aeropuerto Regional de Asheville toma muy en serio su papel como una organización fundamental en la región», expresó Bleiweis. «Esta no es solo un área de trabajo, es nuestro hogar, donde criamos a nuestras familias y estamos profundamente comprometidos con nuestra comunidad.»
Desde el paso de la tormenta, AVL se ha transformado en un centro improvisado de socorro ante desastres, albergando operaciones de aviación militar, general y comercial que han facilitado la entrega de suministros vitales y han servido como base para innumerables helicópteros de búsqueda y rescate.
Bleiweis destacó la generosidad de los voluntarios, donantes y pilotos que han participado activamente en los esfuerzos de socorro.
«Estamos increíblemente agradecidos por la generosidad de todos aquellos que donaron suministros y de los pilotos que los transportaron», añadió.
Asimismo, mencionó el valioso apoyo de la comunidad aeronáutica de Carolina del Norte y el sureste de los Estados Unidos, cuya colaboración ha sido esencial para que el aeropuerto pueda operar de manera eficiente en esta etapa crítica.
El Aeropuerto Regional de Asheville continúa comprometido a mantener las puertas abiertas para los esfuerzos de ayuda necesarios, con vuelos comerciales que reanudaron sus operaciones tan solo tres días después de la tormenta. «La conectividad aérea es ahora más importante que nunca», señaló Bleiweis.
